Por: Germán Martínez
Lizarzaburu.
ESTOS días partió GEBRIEL GARCIA MARQUEZ, de este
mundo físico terrenal, quien fue uno de los latinoamericanos más compenetrado
con su realidad sociocultural y política, atreves de la literatura (Cien años
de soledad, una de sus novelas) Así es
la vida, ya que la tenemos prestadita,
gracias a Dios Gabo (así lo conocían sus
más allegados… y que por cariño así llego
hacer llamado por todos los latinoamericanos)
Aracataca 1942, lo vio nacer-México
2014 (este hermano país, fue quien le abrió su corazón cuando salió asilado con
la familia de su querida Colombia, y lo vio morir), aunque Gabo, residió en
varios países de América y Cuba, su vida está llena de vicisitudes, pero cuando
le sonrió la fortuna supo compartir con los demás congéneres de su existencia
terrenal lo que tenía, por ejemplo: fortaleció el ejerció periodístico, en
América y acuño una frase QUE EL MEJOR
OFICIO ES EL PERIODISMO, como escritor
fue el impulsor del estilo Mágico
Realismo y promovió la publicación de muchas obras de escritores jóvenes que
siempre andan a la búsqueda de ser publicados, su sola presencia y sus ideales
de igualdad y justicia defendieron a Cuba del apartheid político impuesto por
el régimen antimperialista de los
gobiernos de turno en la sufrida Estados Unidos de América y de cualquier otro
régimen que sea injusto con la libertad
y los derechos humanos de la persona.
Las últimas imágenes que hemos
logrado ver en la tele, fue a un Gabo, que amaba la cultura popular que se basó
de ella la refino y le dio su lugar en
la historia de las letras, y este gesto de honestidad le llevo a obtener el
galardón de PREMIO NOBEL DE LITERATURA, primer colombiano en lograr esta presea
honorifica que le cambiara la vida económica pero no su noble corazón que lo ha
trasformado en más humano. Hoy si
después de una penosa agonía sus huesos fueron incinerados como ya no pudiendo
en el futuro mágico de la literatura de traerlo de nuevo a la vida, ni para comprobar atreves del ADN
cuando alguien reclame ser hijo e hija de Gabo, no habrá como comprobarlo, como
hombre universal podrá ser recordado en cualquier país, ya que no habrá un
lugar físico donde ir a dejarle flores ni donde ir a conversar con él en su
última morada, pero en cada corazón de cada investigador literario y de los
amantes de las aventuras GABRIEL GARCIA MARQUEZ, vivirá en nuestros corazones. Así
que chao Gabo y puedo decir: EN EL DOLOR
POETAS. Este poeta no ha muerto, solo ha cambiado de materia y aun estará con
nosotros ok.
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